El prostíbulo barcelonés La Vie en Rose lleva unas semanas anunciando ufano en las páginas de contactos de los principales diarios que ha obtenido la certificación de calidad ISO 9001. Su web añade que es el primero y único de España que la posee, y que se trata del “mejor local de copas de Barcelona” con siete habitaciones completamente equipadas, a la vez que ofrece en pdf la licencia administrativa municipal de “bar musical con reservados para servicios de naturaleza sexual”. Un burdel con certificado de calidad homologada ISO 9001, referido a sus sistemas de gestión, no deja de ser un burdel. No practica tan solo el oficio más antiguo del mundo, també el oficio más degradante del mundo. La prostitución de calidad es un contrasentido, una contradicción en los términos, por más que mejoren la gestión de los locales autorizados.
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