El banco de la calle gerundense de las Hortes y la carrera de Forrest Gump

Delante del escaparate principal de la Librería 22, en la calle gerundense de las Hortes, hay dos objetos de mobiliario urbano plantados en la acera por los servicios municipales: unos tubos curvados para amarrar bicicletas y un banco. El banco es igual los demás de la calle, sin embargo se ha convertido en único, eminente y simbólico. El librero Guillem Terribas y su sucesor Jordi Gispert se han retratado en él infinidad de veces junto a la panoplia de visitantes del establecimiento. Ahora la propia librería ha empezado a publicar en Facebook una serie numerada de estas fotos, queanda por la número catorce. Ha dado pie al montaje fotográfico adjunto, con el actor Tom Hanks en el inolvidable papel de Forrest Gump. No es un banco tranquilo para entrar en estado de meditación ni siquiera para descansar, ya que el usuario puede estar seguro de tenerse que levantar al cabo de pocos mimutos para saludar uno u otro conocido que acude a la librería o transita por la calle peatonal. Más que un banco, es una espontánea agencia de citas, garantizada y rápida.
Sentarse un rato aquí cualquier día laborable permite pasar revista a la sociedad local como en una novela de Flaubert. Solo falta que sirvan algún aperitivo, pero de eso ya se encarga el bar Neptuno de enfrente. Los servicios municipales también le han colocado delante un banco gemelo, en el que me han hecho más de una entrevista y dado más de una sorpresa. Que dos elementos del mobiliario urbano tan comunes hayan alcanzado el estatuto de institución ciudadana es un mérito que honra la biología de la calle de las Hortes y la carrera legendaria de Forrest Gump.