Me sorprende que el diario El País se sorprenda y dedique hoy honores de portada al “descubrimiento” de una lujosa finca de Palamós que desde los años 1950 rodea su espectacular piscina con un claustro románico auténtico del siglo XII, de procedencia desconocida, probablemente arrancado de alguna abadía de Burgos o de Segovia, por el estilo emparentado con el de Santo Domingo de Silos. Me sorprende que lo consideren noticia de portada. Todo el Ampurdán, toda Cataluña, toda España y todo el mundo mundial están repletos de piezas de arte arrancadas de su emplazamiento original de modo más o menos legal y traspasadas a compradores particulares o a museos públicos. Este traspaso, con frecuencia traumático, representa la propia base de las colecciones de arte privadas y públicas. Los sepulcros góticos de tres
caballeros del castillo de Foixá se contemplan en la ermita del hotel La Gavina de S’Agaró, igual que los capiteles de Sant Pere de Roda fueron recolocados modernamente en el castillo de Peralada y en colecciones particulares no visitables. La considerada mejor pieza escultórica románica de Europa (el relieve del maestro de Cabestany “La aparición de Jesús a sus discípulos en el mar”) procede del pórtico de Sant Pere de Roda y se encuentra en el museo Frederic Marés de Barcelona. Los elementos góticos del castillo Voevodski en Cap Roig (Calella de Palafrugell) son de procedencia desconocida y probablemente muy cercana a los citados hoy por el diario El País. Por no hablar de todo el románico pirenaico del Museo Nacional de Arte de Cataluña. La manera como todas esas piezas llegaron a su actual ubicación es fruto del espolio, a veces fraudulento y otras veces más controlado y conservacionista. Si el diario El País desea tirar del hilo de lo que hoy presenta como noticia de portada, le puedo asegurar que llegará muy lejos en un radio de pocos kilómetros.
caballeros del castillo de Foixá se contemplan en la ermita del hotel La Gavina de S’Agaró, igual que los capiteles de Sant Pere de Roda fueron recolocados modernamente en el castillo de Peralada y en colecciones particulares no visitables. La considerada mejor pieza escultórica románica de Europa (el relieve del maestro de Cabestany “La aparición de Jesús a sus discípulos en el mar”) procede del pórtico de Sant Pere de Roda y se encuentra en el museo Frederic Marés de Barcelona. Los elementos góticos del castillo Voevodski en Cap Roig (Calella de Palafrugell) son de procedencia desconocida y probablemente muy cercana a los citados hoy por el diario El País. Por no hablar de todo el románico pirenaico del Museo Nacional de Arte de Cataluña. La manera como todas esas piezas llegaron a su actual ubicación es fruto del espolio, a veces fraudulento y otras veces más controlado y conservacionista. Si el diario El País desea tirar del hilo de lo que hoy presenta como noticia de portada, le puedo asegurar que llegará muy lejos en un radio de pocos kilómetros.
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